Érase una vez una mujer compasiva que se encargó de rescatar a un joven felino de apenas tres meses y de concederle una nueva vida. Y así comenzó la historia de Titus, el gato con un solo ojo.
En el momento de su rescate inicial, Titus era un cachorro diminuto de 400 gramos con un ojo saltón notable. También tuvo que luchar contra una infección respiratoria y estaba desnutrido. Lo más triste fue que lo destinaron a la eutanasia. Sin embargo, la suerte de Titus cambió cuando Holly Wise, de Union, Carolina del Sur, se encargó de recaudar fondos para cubrir sus gastos médicos.
Tenía la clara intuición de que la única solución a su problema era operarlo y quitarle el ojo dañado. PURR, una organización de rescate de animales, le proporcionó un hogar de acogida donde pudo recuperarse después de la intervención. El resultado final fue realmente extraordinario: ¡Titus se recuperó por completo y de manera asombrosa!
Kaitlyn informó felizmente que su gato ahora puede comer todo lo que desea y ha alcanzado un peso saludable. Siempre que pasan tiempo juntos en un entorno tranquilo, a él le encanta trepar y frotarse contra ella. Cada vez que Kaitlyn intenta salir de la habitación, él da vueltas alrededor de sus pies y maúlla, ya que no quiere que se vaya. Su ronroneo es contagioso y comienza de inmediato en cuanto salta sobre sus regazos.
A Titus le encanta entretenerse y divertirse con su hermana adoptiva Maggie, que casualmente también tiene un ojo. Maggie corresponde al afecto de Titus y lo adora con la misma intensidad.
Titus y Maggie son grandes compañeros de juegos que podrían pasar horas corriendo y rodando mientras son muy felices.
Si estás interesado en darle a Titus un hogar lleno de amor, ¡envía un mensaje a PURR a través de su página de Facebook!