Presentamos a Carbon, un gatito joven que tuvo un comienzo difícil en la vida. Con tan solo un mes, fue abandonado y se encontró vagando por las calles de un pequeño pueblo.
La mayoría de la gente lo rechazó, dejándolo vagar hasta que se instaló en el ingenio azucarero local, donde finalmente lo dejarían en paz. En palabras de un aldeano: «No lo echarán de allí, ya que a nadie le importa este pobre bebé».
Las personas preocupadas pronto se dieron cuenta de que Carbon necesitaba ayuda. Se aseguraron de que recibiera atención médica, alimentación y los nutrientes necesarios para prosperar.

Cuando Carbon comenzó a recuperar su fuerza, comenzó a transformarse, mostrando su naturaleza amistosa y recibiendo su primera vacuna.
La historia da un giro conmovedor cuando Carbon recibe una noticia maravillosa: ha sido adoptado en un hogar amoroso.
Allí, rápidamente se convierte en el centro de atención y se hace amigo de Pepina, una cerdita cariñosa y regordeta. El dúo disfruta jugando juntos a diario y forja una hermosa amistad.

Ahora, Carbon está en el corazón de su familia adoptiva, embarcándose en un nuevo capítulo lleno de amor y aventuras.
Gracias al cuidado y apoyo de quienes lo cuidaron, Carbon está prosperando en su hogar definitivo, bañado por el afecto de sus nuevos padres adoptivos.
Nuestro más sincero agradecimiento a todos aquellos que ayudaron a este angelito en su viaje hacia un futuro más brillante.











